Desarrollo y Técnica

La preparación física en el tenista es un proceso que debe desarrollarse durante todas las etapas de la práctica deportiva, desde infantiles hasta profesionales.

Muchos relacionan el trabajo físico al alto rendimiento y no es así, ya que este tiene vital importancia en todas las etapas de desarrollo, es durante la infancia donde la ejercitación motriz debe ser intensamente estimulada, lo que no se adquiera en cuanto a motricidad en esta etapa ya no podrá obtenerse en años posteriores.

Los entrenadores debemos tener en cuenta que existen etapas optimas de desarrollo de las diferentes capacidades motoras, y estas etapas deberán ser respetadas estrictamente si deseamos colaborar con el objetivo del deportista que es ingresar a la competencia profesional, la preparación física deberá estar continuamente presente en las diferentes etapas, aportándole al deportista los métodos y herramientas necesarias para poder abordar las siguientes etapas sin mayores dificultades, de resultar esto el deportista ingresara a la competencia de elite con una optima integridad física, lógicamente esto no le garantizara el éxito, ya que deberá contar entre otras cosas con el talento suficiente, controles emocionales y demás para primero poder arribar y luego mantenerse como deportista profesional.

Lógicamente el paso de tenista juvenil a profesional resulta algo complejo, situación que no todos los deportistas pueden llevar a cabo de igual manera, diferentes circunstancias son trascendentes en esta etapa. Es un momento del proceso de desarrollo en el cual se presentan múltiples cambios, no solo físicos sino también emocionales. El deportista deberá afrontar estos cambios y lograr sobrellevarlos, para esto es indispensable contar con la presencia y colaboración de un entorno familiar y afectivo y un equipo de trabajo que comprendan, estimulen y apoyen estos cambios, de lo contrario la fragilidad, los temores y dudas acerca del futuro, que acompañan a la mayoría de los deportistas en esta etapa, no le permitirán continuar en la búsqueda del objetivo deseado.

Los entrenadores debemos conocer estas etapas evolutivas y comprender que no todos los deportistas adquieren un desarrollo madurativo equitativo, por lo tanto la preparación física deberá adecuarse a estas circunstancias. A manera de ejemplo un deportista de 16 años cronológicos, puede quizás tener 14 años y medio a niveles fisiológicos pudiendo comprobarse esto mediante estudios específicos, y sin embargo deberá competir quizás con deportistas de 16 años tanto cronológicos como fisiológicos, de esta manera las diferencias en las capacidades condicionales (fuerza, resistencia y velocidad) serán considerables.

En muchas oportunidades el deportista arriba a la etapa profesional, en la cual debe competir al mas alto nivel, sin encontrarse en igualdad de condiciones físicas, ya que su desarrollo madurativo no se lo permite al encontrarse incompleto. En estos momentos generalmente el deportista se frustra, siente temor por haberse preparado de gran manera, haber realizado una buena pretemporada, sin embargo al tener que afrontar un partido a 5 sets no lo puede realizar, las causas no se deben a un entrenamiento inadecuado sino que su sistema fisiológico aun no se lo permite, deberá seguir madurando para poder afrontar estas situaciones, esto es algo que el deportista deberá comprender y aceptar, que es solo una cuestión de tiempo. Aquí cobra vital importancia la participación de los entrenadores, pudiendo sobrellevar estas circunstancias, transmitiendo tranquilidad al deportista.

Sin duda el paso que debe realizar el tenista, de juvenil a profesional, requiere de un importante cambio del cual no solo será protagonista el deportista sino también su entorno afectivo y profesional.