Psicología del Deporte

Lic. en Psicología y Master en Psicología del Deporte y la Actividad Física (UNED, España)
Candidato a Doctor en Ciencias Implicadas en el Progreso Deportivo del Ser Humano (UCO, España)
Psicología Deportiva Chile

Dentro de las numerosas investigaciones realizadas en la psicología del deporte, hay una particularmente importante realizada por el investigador Rosenthal, no sólo porque ratificó los conceptos acerca de las expectativas de autoeficacia de un deportista, sino que además generó muchos otros estudios que ampliaron el conocimiento con respecto a la denominada PROFECÍA AUTOCUMPLIDA.

El estudio en cuestión se llevó a cabo en un colegio. Allí se realizó una evaluación para medir la inteligencia o coeficiente intelectual de los alumnos. Para ello fueron agrupados en tres niveles: superior, medio e inferior.

Una vez concluida la evaluación y sin analizar los resultados del test, Rosenthal seleccionó al azar a un 20% (pertenecientes a los tres niveles) del total de los alumnos evaluados, y les comunicó a los profesores que ese 20% poseían el nivel de coeficiente intelectual más alto, y que por lo tanto, se esperaba un aumento en el rendimiento escolar de ellos. Al cabo de un tiempo se comprobó que efectivamente ese 20% de los alumnos escogidos al azar, presentaban un aumento en el rendimiento escolar, en relación al restante 80%.

La conclusión es que la expectativa que se crearon los profesores con respecto a sus alumnos “con mayor potencial intelectual” produjo que éstos, efectivamente, progresaran más intelectualmente.

Lo valioso de esta investigación es que confirmó primero que nada la importancia de una expectativa real acerca de nuestras futuras actuaciones y además la importancia que tienen los otros en nuestros comportamientos.

¿Cuál es la relación de este fenómeno con el deporte?

El “EFECTO PIGMALIÓN”, descrito anteriormente, puede darse, por ejemplo, cuando un entrenador tiene una idea previa acerca de su deportista, a partir de la cual planifica y dirige los entrenamientos. Estas expectativas que el entrenador tiene acerca de su deportista, puede ser tan poderosa que condicionaría su forma de entrenarle. Observándose, en ocasiones, de manera muy decisiva en el resultado posterior de ese entrenamiento o incluso durante una competencia.

Cada una de las expectativas que el entrenador realiza con cada uno de sus deportistas, las transmite no sólo verbalmente – a través de lo que le dice directamente -, sino que también es posible una transmisión de las expectativas por la vía de la comunicación no verbal – gestos, miradas, posición de las manos y del cuerpo – además de todas las otras técnicas que él utiliza.

Por lo tanto se hace necesario que un entrenador tenga claro la relevancia que en muchas ocasiones producen sus comentarios, sobretodo aquellos entrenadores que trabajan en el área formativa, con deportistas en plena etapa de aprendizaje.

En este sentido lo más deseable sería que puedan transmitirse más expectativas reales y positivas hacia los deportistas, ya que, favorece la autoconfianza del deportista, impactando positivamente en su rendimiento.