Psicología del Deporte
Interdisciplina en la rehabilitación de los deportistas con lesiones de sobreuso 2/4 Por... Lic. Nelly Giscafré y Dr. Francisco García Ucha Los especialistas entendieron así, que pueden utilizarse dos modelos
para encarar la rehabilitación de una lesión de sobreuso:
1. El modelo médico tradicional basado en la obediencia a la autoridad médica. 2. El modelo centrado en el deportista lesionado, basado en el autocontrol y autodeterminación del deportista en la realización y aplicación de las medidas de rehabilitación. Según Rose, J., y Jevne, J. (1993) la diferencia radical entre los dos enfoques consiste en determinar sobre quien recae en última instancia la responsabilidad de efectuar los tratamientos y tomar las medidas necesarias para mantener una actitud adecuada en entrenamientos y competencias. El modelo tradicional considera que es el médico la última autoridad en el tratamiento de la lesión, en el modelo centrado en el deportista lesionado recae sobre él mismo. Ambos modelos llevan implícitas, asimismo, diferentes concepciones en cuanto al manejo del deportista lesionado. El modelo tradicional hace hincapié en la educación como un intento de extender y acrecentar la influencia del medico sobre la cura del deportista. El modelo de refuerzo de la autodeterminación y autocontrol del deportista, en cambio, persigue el mejorar las habilidades del lesionado para afrentar, dirigir y controlar el proceso de tratamiento y su readaptación al entrenamiento y la competencia. En general, las limitantes del modelo medico tradicional están basadas en que las acciones terapéuticas culminan la intervención y esto no incluye la necesidad de que el deportista se haga responsable de las decisiones en la actividad deportiva. El modelo centrado en el deportista lesionado puede tener como limites que al enfocarse desde dos puntos de vista: Primero, el prescribir un tratamiento individual para cada deportista y respetar la toma de decisiones individuales en cuanto al mismo, dificulta la posibilidad de diseñar un procedimiento común para todos los que sufren de lesiones de sobreuso en el deporte y comparar los resultados obtenidos. Segundo, el modelo parece basarse en el supuesto de que la salud sea, en última instancia un problema individual cuya protección es una decisión personal sin que los médicos del deporte tengan responsabilidad última sobre el mismo. Aun siendo el manejo de las lesiones de sobreuso en los deportistas, dependientes de las decisiones del deportista, los médicos son formados para tomar decisiones terapéuticas en la dirección de mejorar y sanar al lesionado. No es cierto entonces que, por ejemplo, se pueda considerar un éxito terapéutico que un deportista lesionado no respete las medidas de vitamina terapia, aun a sabiendas de los riesgos a que se expone. Aunque, es el deportista el que toma las decisiones diarias, es posible identificar conductas disfuncionales e intervenir sobre sus determinantes tales como las creencias, estereotipos, actitudes y percepciones de sí mismo, para optimizar el tratamiento y lograr mejor pronóstico y sostener su calidad deportiva. Integración de los modelos de tratamiento A continuación se presenta es un programa cuyo propósito es lograr la optimización del proceso de rehabilitación en deportistas con lesiones de sobreuso. El programa considera que, si bien el deportista es responsable del manejó de la lesión y toma las decisiones diarias respecto a su rehabilitación, la adherencia al tratamiento señalado por el medico es un medio necesario para mejorar el pronóstico y recuperar su capacidad para el deporte. De este modo, se extiende a los dos enfoques, el centrado en el tratamiento y el centrado en el deportista lesionado, como modelos complementarios y no opuestos, siendo uno de los objetivos principales de la intervención preparar al deportista para que pueda tomar decisiones que lleven a resultados positivos sobre su salud y calidad como deportista. El programa contempla tanto intervenciones para cambiar conductas desadaptadas que pueden dar lugar a la lesión como intervenciones para promover la responsabilidad y bienestar personal. Se propone, además, la adaptación del tratamiento de la lesión a las características de personalidad especificas del deportista, por ejemplo, mientras que la modificación de creencias implica un intento de lograr un cambio conductual en la dirección de la adherencia al tratamiento, otras intervenciones apuntan a adaptar el tratamiento más indicado a las necesidades especificas del deportista. Así, el entrenamiento para detectar los síntomas de progreso o retroceso del proceso de rehabilitación tiene el fin de disminuir la frecuencia de chequeos. Las intervenciones que apuntan a aumentar la asertividad y la percepción de auto eficacia, por otro lado, se proponen como punto de partida de objetivos propios de los dos modelos, ya que un aumento en la percepción de auto eficacia no sólo determina conductas adaptadas en la actividad deportiva sino también es fuente importante de motivación, responsabilidad y satisfacción personal. |
Delicious | Digg | StumbleUpon |